El papa Francisco se reunió con el líder de un grupo secesionista de católicos tradicionales, en un intento por poner fin a un cisma de un cuarto de siglo. La Fraternidad de San Pío X anunció el lunes que la reunión de 40 minutos, realizada el viernes, fue cordial y que se produjo debido a que Francisco deseaba «una reunión privada e informal» con su superior, el obispo Bernard Fellay.
El Vaticano reanudó en 2014 el diálogo con la organización católica después que las conversaciones sobre temas doctrinales se interrumpieron. El año pasado, el papa Francisco ofreció un gesto extraordinario al permitir que los sacerdotes de la fraternidad, que no tiene estatus legal en la iglesia, oyeran confesiones durante su Año Santo de Misericordia.
El ya fallecido arzobispo Marcel Lefebvre fundó la sociedad tradicionalista, que se opuso a la misa en idiomas vernáculos impuesta por el Concilio Vaticano II y el acercamiento a los judíos.