El atentado suicida que causó al menos 65 muertos en Pakistán golpea con «violencia fanática» a «miembros de las minorías cristianas«, indicó el domingo por la noche El Vaticano.
En una declaración a la prensa, el portavoz del Vaticano, el padre Federico Lombardi, afirmó que el papa Francisco fue informado de esta «horrible masacre de decenas de inocentes, que proyecta una sombra de tristeza y angustia sobre la fiesta de Pascuas».
«Una vez más el odio homicida afecta vilmente a las personas que están menos protegidas. Con el Papa, oramos por las víctimas, estamos cerca de los heridos, las familias afectadas por un inmenso dolor, los miembros de las minorías cristianas afectadas una vez más por la violencia fanática, y de todo el pueblo paquistaní herido», añadió el portavoz.
Al menos 65 personas murieron en un atentado suicida el domingo por la noche cerca de un parque de Lahore, gran ciudad del este de Pakistán, donde cristianos celebraban las fiestas de Pascua.
En Pakistán, grupos islamistas armados han tenido como objetivo a la minoría cristiana que representa cerca del 2% de la población de este país mayoritariamente musulmán sunita de 200 millones de habitantes.