Expresidente de Asamblea General de la ONU acusado de corrupción

El expresidente de la Asamblea General de Naciones Unidas John Ashe aceptó más de 500.000 dólares en sobornos de un magnate inmobiliario chino y otros empresarios a cambio de ayuda para obtener contratos lucrativos, incluso gubernamentales, según documentos de la justicia federal de Estados Unidos develados el martes. En total seis personas, incluso otro diplomático —el dominicano Francis Lorenzo— están involucradas en la investigación.

A cambio del dinero, dicen los fiscales federales, Ashe aprovechó su cargo como residente permanente ante Naciones Unidas de la nación caribeña Antigua y Barbuda, como también titular de la Asamblea General, para presentar un documento de la ONU en apoyo de un proyecto de bienes raíces del multimillonario chino Ng Lap Seng. La maquinación se desarrolló a lo largo de casi tres años, entre 2011 y 2014 y abarcó su designación como titular de una Asamblea General, agregaron.

Ng y su asistente, también nombrado en la acusación, fueron detenidos y acusados de mentir sobre el plan de introducir 4,5 millones de dólares en efectivo a Estados Unidos durante varios años a bordo de jets privados. No estaba en claro si los fiscales suponen que parte de ese dinero fue utilizado en el caso de Ashe. Según documentos judiciales, Ashe aprovechó su posición para hacer que la ONU promoviera un centro de conferencias en Macao desarrollado por Ng. Este centro debía funcionar como una especie de operación satélite de la ONU, a juicio de la fiscalía.

Los fiscales dicen que parte de los fondos se destinaron a pagar una vacación de la familia de Ashe y para construir una cancha de baloncesto en su hogar de Dobbs Ferry, estado de Nueva York. Ashe abrió dos cuentas bancarias para recibir los fondos y después no reportó más de 1,2 millón de dólares de sus ingresos, dijeron funcionarios.

Ashe fue arrestado el martes. Nadie respondió un llamado telefónico a la misión de Antigua y ya no figura en el directorio de la ONU. Un mensaje que se dejó a un representante de la Asamblea General no obtuvo respuesta inmediata.

NUEVA YORK (AP)