La combinación del virtuoso mundo del jazz con múltiples escenas del séptimo arte, representadas con selectos clips de grandes clásicos del cine, fue lo que se experimentó la noche de miércoles 6 de julio en el bar Maura & Simón (Managua) con la participación de Jazz Hacia El Sur, acompañados de la producción audiovisual del cineasta nicaragüense Gabriel Serra.
En un ambiente íntimo, ecléctico y con un toque «clásico-moderno» que nos entrega este género musical, la agrupación de músicos de jazz conformada por Tom Kessler, Jahaziel Arrocha, Vico Díaz y Fernando Barrios, demostraron ser unos jóvenes aplicados a tocar una música que se caracteriza por su riqueza de sonidos, siendo cada instrumento uno muy vivo dentro del esquema general de cada pieza.
Al frente de la promoción y proyección de Jazz Hacia El Sur en su visita por Nicaragua está Serra, quien aporta sus vastos conocimientos de expresiones artísticas, en este caso el cine, para acoplar un acompañamiento específico que ayuda a formalizar una alianza sonido-imagen, lo que termina en un grato espectáculo para asimilar detenidamente.
Gabriel conoció a Fernando, baterista de esta agrupación, desde hace unos 8 años para cuando cada quien buscaba intereses artísticos en México, uno en cine y el otro en música. «Compartíamos momentos con amigos centroamericanos con quienes nos movíamos ahí en el DF, en fiestas y demás. Con el tiempo Fernando se hizo baterista profesional y así mantuvimos comunicación hasta que formó Jazz Hacia El Sur. Nos contactamos y le ayudé para armar conciertos acá en el país», cuenta Serra.
La inclinación que tienen estos músicos sobre el jazz es algo especial, debido a que para Barrios, de origen salvadoreño, así como para los otros miembros (dos mexicanos y un panameño), es un «proceso de búsqueda hasta llegar a esto. Empecé estudiando la música popular, pero me llamó la atención el jazz por ser algo vigente que se va renovando constantemente. Es una música novedosa todo el tiempo», señala este artista.
«Creo que existe un estigma en cuanto a que esta música pertenece a ciertas clases sociales, pero según mi experiencia creo que es al contrario, es una música inclusiva y puede ser escuchada por todos», agrega Fernando.
Jazz Hacia El Sur ha viajado por países centroamericanos generando esta red de intercambio artístico en diversos espacios, donde se han sentido motivados a continuar llevando su mensaje musical a través del istmo. Sobre Nicaragua, Barrios comenta que se siente sorprendido por la «hospitalidad y el interés de un montón de gente que se nos ha acercado. La calidez ha sido importante y nos hemos sentido en confianza», apunta.
Para esas personas que gustan del mundo del cine, reconocerán fácilmente varias de las escenas que fueron elegidas por Serra, con películas como The Shining, Ciudad de Dios, Trainspotting, entre muchas más, las cuales dan variedad y vida a las emociones que proyecta la esencia de Jazz Hacia El Sur.
Las siguientes presentaciones de esta banda serán en Managua, Granada, San Juan del Sur e Isla de Ometepe en los próximos días, tocando en algunos de los tantos rincones especiales que tiene nuestra bella Nicaragua.
