“¿Hay una sola tanga? Quiero dos en tanga. ¿Hay dos tangas? Quiero tres”. La voz sale desde los altavoces de una famosa discoteca en (Argentina). Desde allí incitan a que las chicas a quedarse en ropa interior en medio de la pista. Esa misma voz es la que lanza amenazas a los presentes: “Cualquier cámara que vea en la pista, automáticamente se va del boliche”.
Algún smartphone, sin embargo, grabó las imágenes en las que se ve a unas tres chicas que bailan semidesnudas y varios hombre cerca de sus traseros, posando para hacerse fotos. Son imágenes de este fin de semana que se viralizaron en YouTube y, a raíz de eso y de oficio, la Municipalidad de Necochea inició acciones legales contra los dueños del lugar y lo clausuró.
Fuentes de ese municipio confirmaron a Clarín que son imágenes obtenidas en esa discoteca -en el que hay público local y también turistas, ya que se trata de uno de los lugares más concurridos de la ciudad- en los últimos días. Según trascendió, aunque eso no se desprende del video viralizado, las chicas habrían sido incitadas a quitarse la ropa a cambio de alcohol gratis.
El local fue cerrado el día de ayer: “Se clausuró Casabellha por falta de documentación y vencimiento de los plazos para presentarla”, dijo Valentín Bustillo, secretario de Gobierno de Necochea. A la vez, el funcionario explicó que desde la dirección de Género se iniciaron acciones judiciales de oficio después de que el video de las chicas se difundiera ampliamente en YouTube.
Fuentes municipales explicaron que la clausura tuvo que ver con cuestiones administrativas que, dado su incumplimiento, permitieron cerrar el local de manera inmediata, sin tener que esperar el proceso judicial iniciado desde el área de Género. En ese sentido, es la UFI 10 la que interviene en la investigación.
Fuentes policiales agregaron que, durante la primera quincena de enero, se había multado a Casabellha por vender más bebidas alcohólicas de las que el lugar tenía permitido, según su habilitación.
El video de las chicas, a las que el DJ pretende hacer bailar -y quien tuviera el micrófono, desvestir-, circuló primero por WhatsApp y luego fue subido a plataformas de vídeo como YouTube, sentenció La Vanguardia.
