Académicos estadounidenses analizaron datos colectados por los servicios sociales de EE.UU. sobre más de 2.200 mujeres y hombres jubilados con edades comprendidas entre los 57 y 85 años y llegaron a una sorprendente conclusión: la percepción común de que el sexo es igualmente saludable para todas las edades y géneros es falsa, según un artículo publicado en ‘Journal of Health and Social Behavior’.
«Es sorprendente [observar] que los hombres que lo practican más de un vez a la semana a una edad avanzada, padecen enfermedades cardiacas más frecuentemente que quienes dejaron de hacerlo años atrás», afirma la investigadora Hui Liu de la Universidad Estatal de Míchigan. Al descubrir el impacto negativo de la práctica sexual sobre la salud en los hombres, los investigadores observaron una tendencia contraria en lo que se refiere a las mujeres: su vida sexual activa disminuye el riesgo del desarrollo de hipertensión.
Esto significa que los terapeutas y sexólogos deben ser muy cautelosos a la hora de recomendar a sus pacientes de edad que practiquen sexo, puesto que su beneficio varía dependiendo del género y la edad de la personas, concluyen los autores.