El tatuaje que se hizo en el pecho una mujer australiana tras una operación por un cáncer de mama ha entusiasmado a muchos usuarios de las redes sociales, informó la BBC.
Alison Habbal, que descubrió a los 36 años que tenía un tumor, sabía que tras la lumpectomía y la mastectomía se quedaría con cicatrices en el seno y sin pezón. A Habbal no le atraía la idea de una reconstrucción de pezón mediante la cirugía plástica, por lo que empezó a buscar un tatuador.
Tras escoger a una tatuadora neozelandesa que hace llamativos diseños se sometió a una sesión de 13 horas el pasado 1 de julio. Satisfecha con el resultado publicó en Facebook e Instagram una foto del tatuaje.
La imagen se volvió viral rápidamente y generó una avalancha de comentarios positivos. Obtuvo decenas de miles de ‘me gusta’ en Instagram y ha sido compartida en diversas comunidades vinculadas con tatuajes.
Lo curioso es que a falta de pezón las fotos del seno de Alison no pueden ser censuradas en las redes sociales.
Alison no es la primera mujer en hacerse un tatuaje en lugar de recurrir a la reconstrucción del seno, ya que esta tendencia toma cada vez más fuerza entre mujeres jóvenes. Alison cree que lo que ha generado tantas respuestas a su publicación es que la foto no solo muestra el seno, sino también su sonrisa.