Vivimos en un tiempo en el que casi nos resulta imposible comunicarnos si no es a través de emojis. Nos ayudan a resumir lo que queremos decir en tan solo 1 o 2 dibujos.
Pero, ¿por qué los usamos? Según Vyv Evans, profesor de la Universidad de Bangor, los emojis llegaron para quedarse: Estamos ante el lenguaje de mayor crecimiento en la historia debido a su increíble nivel de adopción y velocidad de evolución. Como idioma visual ha eclipsado, de lejos, a los jeroglíficos, su precursor egipcio, que necesitó siglos para desarrollarse.
El 72% de los jóvenes de entre 18 a 25 años considera más difícil expresarse con palabras que con emoticones. Hasta se ha creado la Biblioemoji, una biblia escrita solamente con emojis. Hay diarios también que utilizan columnas enteras escritas de este modo para atraer más a sus lectores.
En Emojipedia se ha buscado que ciertos emojis tengan parámetros de significados. Pero la organización encargada de estandarizar los códigos de emoticones, Unicode Consortium, no puede asignarles un único significado o definirlos.