Kim Kardashian protagoniza la tapa de la nueva edición de mayo de la revista Vogue Australia. Y entre muchas otras cosas lo que llama específicamente la atención de la nota, es el trabajo que eligió Kim que le gustaría tener si tuviera una vida normal sin ser Kim K.
A Kimmy le preguntaron a qué se dedicaría si tuviera una vida común y corriente como la de cualquier mortal, a lo que ella respondió sería una investigadora forense y viviría una vida normal.
Los fans de Keeping up with the Kardashians no estarán tan sorprendidos porque muchas veces Kim ocupo ese rol en la serie y hasta en Miami se unió a la policía para irrumpir en un asalto. Además junto a Khloe fue quién primero pensó en contratar a un detective para saber si Scott estaba engañando a Kourtney. Según sus propias palabras, a ella siempre le interesaron esos temas.
Aunque un investigador forense tampoco tendría una vida tan normal. Siempre viendo cuerpos muertos y cosas tenebrosas