La joven, de 17 años, oriunda de Reino Unido padece una inusual condición, la cual provoca que constantemente sufra de filtraciones de sangre en sus ojos, que hace que literalmente llore sangre.
La pesadilla de Marnie-Rae comenzó en marzo de 2013, cuando tosió sangre por primera vez. Dos años después, la joven despertó con el rostro totalmente rojo, ocasionado por el primer sangrado de ojos.
De inmediato, sus padres la llevaron al hospital y luego de varios estudios determinaron que sus ojos estaban completamente sanos. Las siguientes dos semanas sus ojos continuaron sangrando todos los días hasta que también lo hiciera por la nariz, orejas, lengua y uñas.
Los doctores, a la fecha, no han podido diagnosticar a Harvey, pues luego de incontables pruebas médicas lo único que encontraron es que su sistema inmunológico se había debilitado.
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