Una mujer de Reino Unido, Gayle Newland, fue condenada a ocho años de cárcel por haber abusado sexualmente de su amiga mediante un engaño: se disfrazaba de hombre y utilizaba un órgano falso.
Según el fallo del tribunal de Chester, la joven de 25 años cometió una violación basada en identidades falsas, disfraces que ocultaban sus senos y hasta una prótesis peneana.
Newland se hizo amiga de su víctima en Facebook, donde usó como perfil un nombre de varón: Kye Fortune. Al tiempo comenzaron a dialogar por teléfono y Newland siguió fingiendo ser un hombre.
¿Cómo hizo para completar su engaño? Cuando en 2013 acordaron juntarse, Newland le pidió que se vendara los ojos para el encuentro. Así fueron los diez encuentros sexuales, en los que siempre la víctima, cuya identidad fue preservada por razones legales, siempre tenía tapados los ojos.
A modo de defensa, Newland aseguró que su amiga siempre supo que no era un hombre, pero que se prestaba al juego para experimentar con su sexualidad. Negó, además, haber tapado su rostro y ocultar sus pechos. Su abogada consideró «imposible de creer» que no se diera cuenta del engaño.
No obstante, el juez Roger Dutton entendió que la joven había sido víctima de un cruel engaño y por eso condenó a Newland, a quien señaló como «mentirosa, intrigante y muy determinada«.
«Usted fue tan convincente en su engaño que la víctima pensó que al fin había encontrado a un hombre a quien podía amar«, explicó el juez en su fallo.
«Mantuvo esta línea de conducta durante un largo tiempo, en el cual jugó con sus sentimientos, actuando únicamente para su propia satisfacción sexual, sin tener en cuenta el impacto devastador que el descubrimiento de la verdad tendría en la víctima«, agregó Dutton.
Agencias