"Pálido y chirizo" (asustado) quedó el repartidor de productos David Herrera en una de las calles del barrio San Judas, en Managua, luego que dos delincuentes con pistola en mano y a bordo de una motocicleta le obligaran a entregar los 3,500 córdobas de la venta del día, un celular valorado en 150 dólares y su billetera con documentos personales, más otros 700 córdobas de su propiedad.
Se sospecha que los osados bandidos, sean los mismos que momentos antes habían atracado a otros repartidores de embutidos en la Colonia 14 de Septiembre, donde implementando la misma modalidad, los despojaron de una buena suma de dinero para luego darse a la fuga en busca de su próxima victima.
De acuerdo a los testigos, los sospechosos bajaron esta mañana de lunes de una moto color negro y blanco tipo montañera, y sin tiempo que perder desenfundaron el arma contra su presa, en fracciones de segundos ya estaban huyendo con rumbo desconocido y con el jugoso botín.
“Apenas estaba arrimando a la ventana de la pulpería cuando sentí algo en la espalda y escuché a alguien que me decía que no volviera a ver para atrás porque si no me 'cueteaba' (disparaba) y yo pues por salvaguardar mi vida, le dije que se llevara todo. El tipo me comenzó a bolsear y me sacó todo lo que andaba, hasta mis documentos personales se llevó", explicó David Herrera, víctima de los delincuentes.
Una llamada ciudadana movilizó rápidamente a la brigada de Los Dantos y a uniformados de la subdelegación número tres de Policía Nacional, quienes se dieron al trabajo de buscar calle a calle y cuadra a cuadra del barrio San Judas a los malandrines, de los que solo quedó el rastro de sus fechorías cometidas con pocos minutos de diferencia y no se descarta que continúen haciendo de las suyas en lo que resta del día, pero para ello ya está activada la operatividad de la institución del orden, la cual no permitirá que queden impunes de sus delitos.