Tremendo susto se llevó un ciudadano de cuarenta y cinco años de edad al caerle un portón en el sector de Los Robles en una de las calles de Managua.
El perjudicado identificado como Sergio Martín Alonso Márquez circulaba sobre el andén de la calle con dirección oeste a este cuando de repente vio cómo la enorme estructura metálica caía sobre su cuerpo, tanto era el nervio que no pudo moverse, solo protegerse el rostro para evitar mayor gravedad por los golpes que recibiría. El hecho se dió de la Funeraria Monte de los Olivos una cuadra al oeste.
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El hombre quedó completamente debajo de la estructura corrediza que presentó desperfectos, desprendiéndose con dirección a la carretera. Afortunadamente en la situación no se vieron involucradas más personas, sino la historia hubiese sido de mayor gravedad.
Fueron guardas de seguridad de la empresa privada en la que se ubica el portón mencionado los que de inmediato socorrieron a este hombre, quitándole la pesada pieza de metal de encima del cuerpo, estos trataron de acomodar el portón en su sitio, pero solo pudieron sostenerlo para que se presentaran especialistas en la materia para su debida reparación.
El infortunado hombre quedó tendido en el suelo, y quienes lo rodeaban pensaban que su situación era complicada. Se llamó a la Cruz Roja Nicaragüense, quienes movilizaron una de sus unidades para que Sergio fuese atendido y trasladado a un centro asistencial.
El estado de Alonso era estable, presentaba golpes en el cuerpo debido al golpe del portón; un hematoma en el cuero cabelludo en la región derecha de la cabeza y otro menor a nivel izquierdo, necesitaba ser trasladado por el tipo de mecanismo de la lesión para examinarlo más a profundidad; pero el afectado se negó a ser trasladado.
"Nuestro deber es llevarlo, tratar de convencerlo; pero tampoco podemos obligarlo", aseguró Yader Salazar, técnico en emergencias médicas de Cruz Roja Nicaragüense.
El ciudadano se retiró del lugar y siguió su rumbo sin decir de donde venía ni hacia donde se dirigía.