El Gobierno de Italia declaró este jueves el estado de emergencia por el terremoto que afectó el miércoles al centro del país y aprobó un primer paquete de ayudas como campos de atención para las víctimas, por un valor de 50 millones de euros, anunció Matteo Renzi, primer ministro italiano.
El presidente de Italia, Sergio Mattarella, expresó, durante la reunión del Consejo de Ministros, su «profunda conmoción» por el impacto del sismo en las localidad italianas, el cual es responsable de la muerte de al menos 250 personas, según los últimos datos oficiales.
Sin embargo, Renzi resaltó que aunque el saldo de fallecidos es altísimo, la cifra de personas rescatadas vivas es «la más alta de la historia de los últimos terremotos, con 215 personas».
El primer ministro aprovechó la ocasión para enaltecer su labor de reconstrucción de la ciudad de L’Aquila, destruida por un terremoto en 2009, bajo el gobierno conservador del ex ministro Silvio Berlusconi.