Líderes hispanos se plantaron el lunes frente a las oficinas de Donald Trump en la Quinta Avenida de Nueva York para criticarle por sus declaraciones sobre un juez federal de origen mexicano al que el magnate inmobiliario ha desacreditado por su etnicidad.
Carlos Menchaca, el primer concejal de la ciudad de origen mexicano, dijo durante la rueda de prensa que ya es hora «de enviar a este tipo a casa», en referencia a Trump, el precandidato republicano a la presidencia de Estados Unidos.
Trump dijo la semana pasada que el juez Gonzalo Curiel no es imparcial en una demanda que instruye y que fue presentada por antiguos alumnos de la Universidad Trump contra el magnate. El político republicano aseguró que Curiel no es imparcial porque sus padres nacieron en México y Trump promueve la construcción de un muro en la frontera entre México y Estados Unidos.
Portavoces de la campaña electoral de Donald Trump no respondieron a un mensaje de Associated Press solicitando una respuesta a las acusaciones realizadas en la rueda de prensa.