El juez especializado en violencia, Luis Felipe Alvarado, dictó pena máxima para Marvin Fabricio Bravo, quien asesinó de un machetazo a su exsuegro. El atroz hecho ocurrió cuando el fallecido intentó defender a su hija de las violentas agresiones del sujeto.
El reo Marvin Fabricio Bravo, de 30 años, degolló de un machetazo a su exsuegro, Máximo Humberto Bravo, de 83 años; lesionó con la misma arma a su exmujer, Ligia Daniela Martínez Ponce, de 25 años; y a su exsuegra María Mercedes Ponce Díaz, de 65 años; en la calle 10 del reparto Rubén Darío de la ciudad de León, hechos por los cuales el juez dictó 56 años de prisión para el sujeto.
El hecho ocurrió el pasado 31 de marzo a las 11:30 de la noche, cuando el individuo llegó a la casa de habitación del ahora fallecido a discutir con su expareja, a quien hirió primero con un machete, amputándole tres dedos de su mano izquierda.
Su exsuegro, Máximo Bravo, al percatarse de la pelea llegó a reclamarle, fue entonces cuando Marvin le propinó un machetazo en el cuello, privándolo inmediatamente de la vida, y de paso le propinó dos machetazos a su exsuegra.
Aunque el Juez especializado en violencia dictó 56 años de cárcel para el asesino, el Código Procesal Penal de Nicaragua establece como pena máxima para los reos, solamente 30 años, mismos que tendrá que cumplir en el Sistema Penitenciario de la ciudad de Chinandega.