Las autoridades estadounidenses aprobaron el primer medicamento contra un tipo de agresivo de esclerosis múltiple que limita paulatinamente la coordinación del paciente y su capacidad para caminar.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó el medicamento Ocrevus la noche del martes, tras evaluar un extenso estudio según el cual frena el avance de la enfermedad y alivia los síntomas.
Aunque existen diversos tratamientos para el tipo más común de la esclerosis múltiple, no hay ninguno que ataque específicamente al tipo conocido como esclerosis múltiple progresiva primaria. Esa variación es relativamente inusual y afecta a muy pocas personas.
El medicamento también fue aprobado para ser usado contra variaciones menos severas de la esclerosis múltiple.
La medicina se administra de manera intravenosa, cada seis meses. Fue elaborada por Genentech, subsidiaria de la empresa suiza Roche. El precio básico, sin cobertura médica, es de unos 65.000 dólares al año.
La lactancia materna no tiene tan buenos efectos a largo plazo
Durante los últimos años ha crecido la tendencia de aconsejar a las madres que realicen la lactancia natural. Y con razón. Aunque un nuevo estudio acaba de poner en duda sus beneficiosos efectos a largo plazo.
A corto plazo, sus bondades son notables: ayuda a los recién nacidos a combatir las infecciones y a los bebés prematuros a superar sus primeras semanas de vida con mayor facilidad. También es de gran ayuda para establecer los vínculos entre la madre y el niño en sus primeras horas de vida.
Pero según un nuevo estudio publicado en la revista especializada Pediatrics, sus efectos a largo plazo son bastante neutros, ya que no está relacionado con ningún impacto en el desarrollo cognitivo ni tampoco en el comportamiento de los bebés a largo plazo. Para llegar a estas conclusiones, los investigadores siguieron a 7.478 niños irlandeses nacidos a término. Después, fueron evaluados cuando cumplieron tres años y nuevamente al llegar a los cinco.