Los peroles de los galerones de comida de cada uno de los mercados de Managua, están llenos de alimentos propios de la temporada de Semana Santa y que coincide con el inicio de la cuaresma.
Lo que más sobresale es el pinol de iguana que se cocina a fuego lento hasta dar con el punto necesario para consumirlo.
Doña Paola Marchena, comerciante y cocinera, dijo que para el pinol de iguana se debe de buscar la masa de maíz tostado, luego se le echa la carne de iguana y otros condimentos como la cebolla, chiltoma, tomate, salsa de tomate, mucha naranja agria y su punto de sal.
Otra de las comerciantes del Mercado Roberto Huembes es doña Miriam Siria, que este Miércoles de Ceniza llegó muy temprano a su tramo para elaborar la sopa de queso que también es tradición en Nicaragua.
"Gracias a Dios que hemos vendido esta sopa de queso que tiene un costo de cien córdobas (unos 3 dólares) la taza", dijo esta comerciante.
Al igual que estos comerciantes otras marchantas de otros centros de compras han trabajado para atender las demandas de sus clientes, que gustan saborear un riquísimo platillo que es tradición de los nicaragüenses.
La otra alternativa de alimentos es el pescado frito que se cotiza entre los 150 y 200 córdobas dependiendo del tamaño.
La famosa sopa marinera también no se queda atrás de la oferta alimenticia del país centroamericano, la que se oferta en las mesas de estos tramos donde se cocina esta comida.