Nueva Delhi/Dacca, 11 oct (EFE).- Las autoridades indias devolvieron a 19 refugiados rohinyás, entre ellos 10 niños, a Bangladesh tras encontrarlos en la zona fronteriza de Panitar, en Bengala Occidental, informó hoy a Efe un oficial de este cuerpo de seguridad.
"Atrapamos cerca de la frontera a 19 rohinyás que habían entrado en la India y los devolvimos a Bangladesh", indicó una fuente de las Fuerzas de Seguridad de Fronteras de la India (BSF, en inglés) que pidió el anonimato, sin ofrecer más detalles sobre los deportados, que fueron enviados a territorio bangladeshí el martes.
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La Guardia Fronteriza de Bangladesh (BGB) manifestó a Efe que se percató de la presencia de los rohinyás cuando estos entraron en un poblado en territorio bangladeshí, donde fueron detenidos.
"Durante el interrogatorio nos dijeron que algunos llegaron a la India en 2012 y otros en 2014, y cuando les preguntamos cómo habían llegado a Bangladesh nos aseguraron que lo habían hecho a través de ese mismo país", explicó Subedar Mosharraf Hossain, comandante del puesto fronterizo de Padmashakra, en lado bangladeshí.
Hossain declaró que los rohinyás no les fueron entregados por la fuerza fronteriza india.
El Gobierno de la India ha afirmado en varias ocasiones que la presencia de rohinyás en su territorio supone una "seria amenaza a la seguridad" del país, y Delhi ha reforzado su frontera con Birmania (Myanmar) para impedir la entrada de más refugiados.
El ministro indio de Interior, Rajnath Singh, pidió a finales de septiembre no confundir a los rohinyás "ilegales" que se encuentra en la India, unos 40.000, con refugiados y aseguró que no violarán ninguna ley internacional si los expulsan, ya que se trata de un asunto de "seguridad nacional".
El tema de la posible expulsión de los rohinyás se encuentra en este momento en el Tribunal Supremo indio, que debe decidir sobre el destino de los miembros de esta comunidad no reconocida en Birmania (Myanmar) como ciudadanos.
Según las últimas cifras de la ONU, más de 520.000 refugiados rohinyás han llegado a Bangladesh huyendo de la violencia en Birmania (Myanmar) desde el pasado 25 de agosto.
La crisis de los rohinyás comenzó ese día tras un ataque de un grupo insurgente de esta comunidad musulmana contra instalaciones policiales y militares en el estado occidental birmano de Rakhine, una acción que fue respondida por el Ejército birmano con una campaña tildada de "limpieza étnica de manual".
