MOSCÚ (AP) — Un plan ruso de creación de “zonas de desescalada” en Siria entrará en vigencia el viernes a medianoche, pero pasará al menos un mes antes de que se elaboren los detalles y se establezcan plenamente las zonas de seguridad, dijeron funcionarios rusos.
Las perspectivas de éxito se vieron socavadas por el hecho de que los grupos rebeldes que se oponen al presidente Bashar Assad se negaron a adherirse al plan acordado por Rusia, Turquía e Irán.
Militares rusos dijeron que el plan, acordado el jueves en Kazajistán, prevé la creación de cuatro zonas donde habría alivio para cientos de miles de civiles y alentarían el regreso de muchos refugiados.
Rusia, Turquía e Irán impondrían la seguridad en las zonas, pero el coronel general Serguei Rudskoi, del estado mayor ruso, dijo el viernes que otros países podrían participar, aunque se negó a identificarlos.
Las “zonas de desescalada” estarán vedadas a aviación militar de la coalición que dirige Estados Unidos, indicó el viernes el representante de Rusia en las negociaciones.
Alexander Lavrentyev comentó ese detalle del proceso al día siguiente de las conversaciones en Kazajistán en las que Rusia, Irán y Turquía acordaran establecer esas zonas en Siria. Según el plan de Rusia, la fuerza aérea del presidente Assad dejaría de sobrevolar las zonas designadas en el país, devastado por la guerra.
Todos los aviones militares, incluidos los rusos y turcos, tendrían prohibido sobrevolar esas zonas, señaló Lavrentyev. Los detalles completos del acuerdo del jueves no se han hecho públicos.
La coalición que lidera Estados Unidos podría operar en zonas concretas contra el grupo extremista Estado Islámico, pero las “zonas de desescalada” quedarían cerradas a sus vuelos, señaló el funcionario ruso en conversaciones recogidas por agencias rusas de noticias.
El acuerdo es un nuevo intento para reducir la violencia en el país árabe.