París, 31 mar (EFE).- Dos hombres fueron condenados hoy a prisión de entre ocho meses y un año y a multas de 7.000 y 12.000 euros, respectivamente, por el robo de diez estampas de Pablo Picasso.
Se trata de un técnico de obras, de 61 años, condenado a ocho meses de cárcel exentos de cumplimiento, y su cuñado, un empleado de bar, de 56, con un año de cárcel en firme, según la sentencia del Tribunal Correccional de París.
La investigación se inició el 1 de abril de 2016, cuando la casa de subastas parisina Drouot vendió un lote de nueve estampas con plantilla ("pochoir") de Picasso a un coleccionista estadounidense, quien pagó 51.500 euros por ellas.
Pero nada más adquirirlas se dio cuenta de que se trataban de obras sustraídas, por lo que informó a la policía.
La especializada Brigada de Represión del Robo identificó enseguida al vendedor -el condenado de 61 años-, al que registraron en su domicilio en las afueras de París.
Allí incautaron otro cuatro bronces robados y la décima estampa del lote.
El hombre aseguró que guardaba esas obras en su domicilio en las afueras de París únicamente para hacerle un favor a su cuñado -el segundo condenado-, quien se iba a mudar de la capital a la región de los Alpes.
Este defendió que había recibido las obras tras la muerte de un amigo de la infancia, un hombre conocido por la policía por tráfico internacional de droga.
Los "pochoir" de Picasso se sirven de una técnica por la que se recortan plantillas de cartón o madera y después se estampan sobre el papel.
Gracias a ella, el artista exploró la superposición de planos y el cambio de perspectivas, ambas técnicas apreciadas por los cubistas.