2018 es el año de Meghan Markle. La joven exactriz de origen estadounidense ha sido recibida con cariño generalizado en Reino Unido, desde que se hizo oficial su compromiso matrimonial con el príncipe Harry, hijo menor de la princesa Diana y, hasta hace unos pocos años, un joven rebelde que daba muchos dolores de cabeza a la casa real, pero ahora parece haber enderezado su camino en parte por influencia de la guapa Meghan, que además ha conquistado con su simpatía a los más escépticos… aunque no todo es un lecho de rosas.
Así lo demostró la modelo inglesa Jo Marney, de 25 años, que se encuentra en pleno ojo del huracán, al ser señalada por haber escrito mensajes abiertamente racistas sobre la prometida real.
Marney, que tiene una carrera relativamente conocida en las pasarelas, es mucho más conocida por ser la novia de Henry Bolton, líder del partido ultraconservador y de extrema derecha UK Independence Party (UKIP). La relación fue flor de escándalo cuando Bolton, de 54 años, decidió abandonar de un día para otro a Tatiana Smurova-Bolton, su esposa y madre de sus dos hijos (la menor tiene 18 meses) por Marney, a la que acababa de conocer en una fiesta, abandonando a su familia en plena Navidad.
Lejos de la polémica tan espectacular que despertó ese hecho en sí mismo -hasta los miembros del partido han pedido a Bolton que renuncie a su cargo-, ahora la controversia vuelve a nublar su futuro político después de que el Daily Mail de Londres publicara varios mensajes de WhatsApp en los que Marney critica a Meghan con lenguaje vulgar y racista.
En los mensajes filtrados, la modelo asegura que Meghan es una "negra estadounidense" que "mancharía" la Casa Real británica con "su semilla" y que su matrimonio allanaría el camino para un futuro "rey negro ". Marney también tilda a Markle de ser una "simple y estúpida plebeya" con el"cerebro de pájaro" y de la que " nadie había oído hablar hasta que empezó a salir con Harry" (como detalle curioso, algunos editoralistas ingleses han ironizado al respecto de este último mensaje, ya que el caso aplica también a Marney) .
Cuando la persona con la que Marney se estaba intercambiando mensajes respondió llamándolaracista, ella contestó:" LOL, ¿y qué? No querer que otras razas y culturas invadan tu propia cultura no significa que odie su raza. Simplemente significa que no quiero ver a sus culturas invadiendo la mía".
Como era de esperarse, la aparición de los mensajes ha provocado un auténtico caos en el UKIP, donde llevan lidiando con una crisis de liderazgo político desde hace casi dos años. Bolton, que fue elegido líder del partido el pasado mes de septiembre, se enfrenta ahora a nuevas presiones para abandonar su puesto después de que las bases del partido ya le criticaran duramente por su decisión de abandonar a su mujer por Marney.
Por ahora, la modelo ha recurrido a redes sociales para ofrecer una disculpa: "No era mi intención ofender a nadie y me disculpo sin reservas por cualquier ofensa o herida que mis mensajes hayan podido causar a miembros del público, de UKIP, mis amigos, mi familia y mis seres queridos".
Mientras la prensa inglesa se ha regodeado con el tema, la casa real británica ha preferido mantenerse al margen y no ha emitido comunicado alguno sobre la polémica.