Moore ataca a quienes lo acusan de acoso

BIRMINGHAM, Alabama, EE.UU. (AP) — Con la declaración "que comience la batalla", la campaña del candidato republicano a senador Roy Moore atacó el viernes a las mujeres que lo acusan de acoso sexual. Los defensores de las mujeres calificaron la declaración de táctica intimidatoria gastada y de un intento desesperado de mantener con vida una campaña en peligro.

Moore desoyó las exhortaciones crecientes de abandonar la contienda por parte de republicanos en Washington temerosos no solo de perder una banca que creían segura sino de sufrir un deterioro de imagen entre las mujeres de todo el país ante las arduas elecciones legislativas de 2018.

El equipo de Moore no se hizo eco de esos temores el jueves.

"Me preguntan si les creo a las chicas. No. No les creo a las chicas. Le creo al juez Moore", dijo su estratega Dean Young. "Que comience la batalla… Prepárate para pelear, Mitch McConnell. La pelea contigo será a muerte", añadió en referencia al líder del bloque republicano en el Senado.

El presidente Donald Trump dijo a través de una vocera que las denuncias de acoso sexual contra el exjuez de la Corte Suprema de Alabama eran "muy perturbadoras". Sin embargo y a diferencia de McConnell y la mayoría de los líderes republicanos, no le pidió que abandonara la candidatura.

 

Trump "cree que el pueblo de Alabama debe decidir quién será su próximo senador", dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, pero se negó a aclarar si el presidente respaldaba a Moore.

Trump sí se tomó el tiempo para mofarse del senador demócrata Al Franken, quien emitió una disculpa después que una mujer que había ido de gira con él en 2006, cuando era comediante, de besarla contra su voluntad y manosearle los senos cuando estaba dormida. Trump tuiteó que la foto era "realmente desagradable" y que "apenas la semana pasada sermoneaba a quien quisiera escucharlo sobre el acoso sexual y el respeto por las mujeres".

Moore, un cristiano conservador, se presentó con una decena de líderes religiosos que se turnaron para fustigar a sus detractores.

"Éste es un hombre que no miente. Compárenlo con sus acusadoras", dijo Gordon Klingenschmitt del grupo Orad en el Nombre de Jesús.

En presencia de Moore, Klingenschmitt citó los Diez Mandamientos en un mensaje dirigido a dos mujeres que acusaron a Moore de iniciar contactos sexuales cuando ellas eran menores y él un fiscal treintañero.

"No darás falso testimonio contra tu prójimo", dijo.