Miami (EEUU), (EFE) – Cindy, la tercera tormenta tropical de este año en la cuenca atlántica, tocó tierra en la madrugada de hoy en la frontera entre los estados estadounidenses de Luisiana y Texas, donde se registran inundaciones e intensas precipitaciones.
En su boletín de las 12.00 GMT de hoy, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos indicó que Cindy se encuentra a 65 kilómetros al noroeste del lago Charles, en Luisiana, y presenta vientos máximos de 65 kilómetros por hora.
Se desplaza hacia el norte con una velocidad de traslación de 19 kilómetros y, según un probable patrón de trayectoria, se espera que gire en las próximas horas hacia el norte-noreste y el viernes hacia el noreste.
De acuerdo con esta previsión, el fenómeno meteorológico se moverá el viernes por el interior del sur de Arkansas y Tennessee.
Los meteorólogos del NHC, con sede en Miami, señalaron que Cindy "se degradará a depresión tropical" en las próximas horas y se transformará en un "remanente de baja presión" por la noche.
Se mantiene un aviso de tormenta tropical (paso en 24 horas) desde High Island, en Texas, hasta la ciudad de Morgan (Luisiana).
Se espera que Cindy produzca hasta el viernes una acumulación total de lluvia de entre 7 y 15 centímetros sobre el este de Texas, el oeste y centro de Luisiana y el sur y este de Arkansas.
Las intensas lluvias podrían afectar el sur de Misisipi, el sur y centro de Alabama y el extremo oeste del Panhandle, en la costa oeste floridana.
"Estas lluvias podrían causar inundaciones repentinas que amenazarán la vida en estas áreas", advirtió el NHC.
También son posibles marejadas ciclónicas que podrían causar inundaciones a lo largo de la costa y tornados aislados desde el extremo oeste de Florida hasta el sureste de Luisiana.
La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de Estados Unidos (NOAA) anunció el 25 de mayo que se prevé una temporada de huracanes en el Atlántico con registros "por encima" de lo normal, con la formación de 11 a 17 tormentas tropicales, de las cuales entre 5 y 9 se convertirían en huracanes y entre 2 y 4 serían de categoría mayor.
La primera tormenta tropical de 2017 fue Arlene, que se formó en abril pasado en mitad del Atlántico, más de un mes antes del comienzo de la temporada, seguida de Bret y Cindy.