Un grupo de niños y jóvenes, la mayoría hijos de indocumentados, partió el lunes en una caravana desde Miami hasta Washington con la misión de pedir al presidente estadounidense, Donald Trump, que detenga las deportaciones.
"Vamos a Washington en autobús. Esta caravana es sobre nosotros, los jóvenes, que vamos a defendernos ante el acoso del presidente Trump", dijo a la prensa Jasmine, una niña de 10 años que no quiso dar su apellido para proteger a sus padres.
Jasmine es una de los cerca 40 niños y jóvenes de entre dos y 18 años que, acompañados de sus padres y un grupo de activistas, partieron en un autobús blanco portando carteles y camisetas con el eslogan "We belong together" (debemos estar juntos) rumbo a la capital estadounidense.
Allí se reunirán con caravanas de niños y jóvenes provenientes de Nueva York y ciudades vecinas para protestar frente a la Casa Blanca con la idea de hacer llegar sus historias a Trump, quien ha implementado mano dura contra la inmigración ilegal.
Hijos de indocumentados protestan contra Trumphttps://t.co/5jnkMdsUjb pic.twitter.com/79Ae7akzp8
— TN8 Nicaragua (@canaltn8) April 10, 2017
La caravana, organizada por un puñado de agrupaciones de defensa de los inmigrantes, partió desde el centro de Miami luego de protestar contra el alcalde Carlos Giménez por negar a la ciudad el estatus de "santuario".
El 26 de enero, el alcalde del condado de Miami-Dade ordenó a la policía local detener a los inmigrantes indocumentados -una labor de los oficiales de migración federales-, luego de que Trump amenazara a las ciudades que no cumplieran con este requisito con cortarles los fondos de Washington.
Unas 300 ciudades del país han prometido defender a los inmigrantes indocumentados, pero Miami rechazó con esta medida el apodo de "ciudad santuario".
"Hace cinco años deportaron a mi papá", dijo Helena, de 17 años, frente a la alcaldía de Miami-Dade. "Su deportación fue injusta. Él era un buen padre y un gran trabajador".
Con su decisión, "el alcalde Giménez no nos defendió. Vendió a la comunidad inmigrante por dinero", prosiguió la joven, quien tampoco quiso decir su apellido.
La caravana tiene paradas previstas en Atlanta, Georgia, y Raleigh, Carolina del Norte. Espera llegar el jueves a la capital.
Trump llegó al poder con la promesa de deportar 11 millones de indocumentados, la mayoría hispanos.