Pablo Aráuz, conocido internacionalmente como el "Hombre Molotov" por su participación en la liberación del país, quien aparece en una de "las 100 fotos más influyentes de todos los tiempos", rindió homenaje al comandante Carlos Fonseca Amador.
Al conmemorarse 41 años del paso a la inmortalidad del fundador del Frente Sandinista y padre de la Revolución Popular, centenares de somoteños desfilaron por las calles de la ciudad cargando una flor en sus manos.
Entre la multitud, caminaba Aráuz quien dijo que “A él y a todos los héroes y mártires le debemos todos los triunfos que ha tenido el pueblo de Nicaragua, para tener paz, seguridad, bienestar y hermandad donde todos estamos involucrados”, expresó Pablo, mientras caminaba con una flor en sus manos.
El objetivo era depositar las ofrendas en el mausoleo erigido para homenajear a Carlos Fonseca.
Daniel y Rosario depositan una flor con amor para Carlos Fonseca
Pablo recordó la energía que el comandante Fonseca irradiaba a la juventud de su época, como lo hizo Sandino, el Che y muchos que lucharon para tener un mundo mejor.
En memoria de Carlos fueron muchos los que recordaron la inspiración que el comandante les dio para seguir luchando por Nicaragua.
“Seguimos siendo hermanos de él, en esta lucha revolucionaria, Carlos nos ha enseñado que hay que luchar por el pueblo y muchos que cayeron nos han heredado ese amor a nuestro país”, dijo Ángel Pérez, mientras participaba en el homenaje.
El alcalde de Somoto, Mario Rivas Núñez, se mostró emocionado y dedicó el triunfo que obtuvo el Frente Sandinista en las pasadas elecciones municipales al comandante Carlos.
“El Comandante establece compromisos que no son del diente al labio, son compromisos que nacen del corazón y trascienden en el ser humano con la conciencia en los años de lucha de este pueblo que el pasado domingo obtuvo una victoria”, expresó Rivas Núñez.
Además jóvenes de la época recordaron la tristeza que los envolvió al momento que se dieron cuenta que el comandante Carlos había muerto, el profesor Mauricio Rayo recordó cuando la guardia nacional celebró su muerte.
“Los somocistas se alegraron por eso, perifonearon la noticia, más no sabían que ese día Carlos revivió en el corazón del pueblo nicaragüense”.
De esta forma y con más compromisos por una Nicaragua próspera, el pueblo somoteño juró vencer ante cada una de las adversidades que afecten la tranquilidad del país.