Una joven activista por los derechos de los niños que viven en Honduras con el virus VIH fue liberada el martes, luego de que había sido secuestrada más temprano por un grupo de hombres armados, dijeron autoridades.
Keren Dunaway, de 18 años, fue raptada el martes cuando llegaba con su madre, la también activista Rosa González, a la sede de la fundación Llaves, en la violenta ciudad hondureña de San Pedro Sula, donde realizan su labor humanista.
«Lo que podemos decir es que Keren (…) ya está en su casa», dijo a periodistas el ministro de Seguridad de Honduras, Arturo Corrales. Los captores habían liberado primero a González a unas cuadras del lugar, pero su hija, considerada un símbolo de las personas que viven con la enfermedad del SIDA en el país centroamericano, fue llevada con rumbo desconocido.
San Pedro Sula es considerada la ciudad más violenta de Honduras, que desde hace años vive asolado por una escalada de crímenes exacerbados por los cárteles mexicanos de la droga.
TEGUCIGALPA (Reuters)
