Investigadores del Centro de Operaciones Navales de EE.UU. y de la corporación Boston Engineering probaron este jueves un prototipo de robot espía submarino que puede ser controlado con un ‘joystick’ o programarse para que navegue por su cuenta.
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El vehículo submarino no tripulado, llamado GhostSwimmer (‘nadador fantasma’), tiene la forma de un pez y, al igual que estos animales, es capaz de hacer giros bruscos y moverse sigilosamente en el agua, características que lo convierten en ideal para misiones de vigilancia y reconocimiento, informa el sitio web Marine Link.
«GhostSwimmer permitirá a la Marina realizar con éxito muchos tipos de misiones y mantener a buzos y marineros a salvo», dijo Michael Rufo, director del Grupo de Sistemas Avanzados de Boston Engineering.
