Un hombre de Texas que se declaró culpable de asesinar a dos vecinos durante un tiroteo hace 13 años parece encaminado a la ejecución el miércoles. Durante su proceso judicial, Barney Fuller Jr. pidió que se abandonaran todas las apelaciones para acelerar el proceso.
Sería el séptimo reo ejecutado este año en Texas, el estado que más ha aplicado este castigo en Estados Unidos. La ejecución está programada para las 6 pm, hora local.
Fuller, hoy de 58 años, se entregó sin resistir en su casa en las afueras de Lovelady, unos 160 kilómetros (100 millas) al norte de Houston, luego de una balacera en medio de la noche en mayo del 2003 que dejó muertos a sus vecinos Nathan Copeland, de 43 años, y Annette Copeland, de 39, dentro de la casa de ellos. El hijo de 14 años de la pareja sobrevivió a dos heridas de bala y la hija de 10 años escapó porque Fuller no pudo encender la luz de su dormitorio.
Documentos de la corte muestran que Fuller, armado con una escopeta, una carabina y una pistola, hizo 59 disparos antes de irrumpir en la casa de los Copeland y volver a abrir fuego. Fuller fue acusado de hacer una amenaza telefónica a Annette Copeland, y los vecinos estuvieron dos años enfrascados en una disputa a causa de ello.
Fuller se declaró culpable de asesinato. Declinó comparecer en la corte en su juicio en el 2004 y pidió que la fase de sentencia del juicio transcurriera sin su presencia. Solamente entró a la sala del tribunal cuando los jurados regresaron con la sentencia.
El año pasado, pidió que no se hiciera nada para prolongar su tiempo en el pabellón de los condenados a muerte.