Mujeres embarazadas y niños venían en el grupo de indocumentados que pretendían llegar a los Estados Unidos.
Una vez más la Policía de Nandaime retiene a un buen grupo de migrantes africanos que por el cansancio y el hambre estaban en una casa abandonada cerca del kilómetro 76 de la Carretera Panamericana, específicamente en la entrada de la comunidad El Contadero.
En este grupo venían 10 hombres, 12 mujeres y 10 niños y niñas de diferentes edades.
Quisimos conocer un poco más de su situación y el paso por Nicaragua hacia el norte en busca del «sueño americano» pero estos se negaron a brindar alguna información.
Uno de los africanos que habla bien español dijo fuera de cámara que ellos entraron el domingo por la noche a territorio nicaragüense, pero que fueron abandonados a orillas de un río. Además señalo que el «coyote» los traía por veredas, por lo que tuvieron que caminaron varios kilómetros hasta encontrar la casa abandonada donde descansaban cuando llegaron los oficiales de la Policía.
Este hombre recalcaba que ellos solo quieran llegar a su destino. «En ningún momento tratamos de hacer daño a nadie, solo queremos pasar por Nicaragua«, nada más decía.
Según una fuente policial dijo que un grupo de comunitarios al ver la cantidad de niños que venían en el grupo humanitariamente les llevaron comida adonde estaban.
Estos fueron llevados a la estación policial para conocer su estado migratorio y conocer acerca de su documentación legal para después ser llevados a Migración, a la frontera sur de Nicaragua.