Dos hermanos y otra persona que se ganaban la vida honradamente trabajando en el rubro del transporte público fueron asesinados ayer por extorsionadores en la colonia Villanueva y Reparto por Bajo de la capital.
El primer ataque armado se ejecutó al mediodía, cuando dos hermanos, uno cobrador y el otro ayudante, llegaron a la terminal de autobuses de la colonia Villanueva.
Los hermanos Darling Flores Varela (28) y Rommel Flores Varela (23), eran residentes de la colonia Los Pinos, zona oriental de Tegucigalpa. Ambos muchachos trabajaban en la unidad de transporte con ruta Cerro Grande-Villanueva, placa AAT 9164.
Según testigos, las víctimas se bajaron de la unidad para pagar el denominado impuesto de guerra a unos extorsionadores que operan en la zona, subiendo unas gradas del sector y a poca distancia de la unidad de transporte.
Pero después de algún intercambio de palabras los otros hombres sacaron unas armas y comenzaron a disparar contra los trabajadores, segundos después los criminales subieron corriendo las gradas con rumbo al sector número 4 de la colonia Villanueva, pero uno de los armados se percató que las víctimas quedaban con vida por lo que regresó para rematar a los dos hermanos y nuevamente comenzó a disparar contra ellos hasta asegurarse que estaban muertos.
En ese sentido, los cuerpos quedaron tirados, boca abajo, uno a la par del otro, ante el asombro de pasajeros y otras personas que estaban en el lugar. Tras el crimen a la zona llegaron varios parientes que bajo intensos llantos relataron que los hermanos tenían varios años de trabajar en la ruta en mención y antes de entrar al sector transporte, vendían agua.
Por su parte los elementos policiales procedieron a resguardar la escena del crimen para recabar pruebas y tratar de dar con el paradero de los homicidas, pero a la misma hora, en el sector de El Manchen, otros delincuentes cometían un similar ataque en contra de empleados del rubro transporte.
El conductor de un autobús del servicio ejecutivo o era ultimado a balazos por desconocidos.
La víctima es Javier Armando Elvir (33), apodado entre sus compañeros de labores como alias Tumba, quien residía en la colonia Altos de Loarque de Comayagüela.