Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y oficiales de la Fuerza Pública capturaron a siete personas sospechosas de pertenecer a un grupo criminal que, al parecer, planeaba cometer asaltos con potentes armas de fuego.
La policía decomisó dos AK-47, una Mini Uzi, un arma 9 mm y un calibre 22, todas las armas con sus respectivas municiones, las cuales tenía un hombre que aseguró ser ciudadano paquistaní y que se identificó como Rasamad, quien era acompañado por 6 costarricenses que viajaban en dos vehículos por el sector de Agua Caliente de Cartago.
Para las autoridades, en apariencia, estos sujetos componen una organización dedicada al sicariato y los asaltos violentos en la zona de la Vieja Metrópoli, por lo que no se descarta que estuvieran planeando un golpe.
Enrique Arguedas, jefe policial manifestó que la acción se dio gracias a una alerta dada por vecinos luego que los detenidos accionaran las armas en zonas montañosas de Cartago.
Había actividades sospechosas en el barrio, algunos vecinos escucharon varias detonaciones que los alarmaron, en una zona de difícil acceso. Ante esto se desplazaron cinco unidades de Cartago y Paraíso para no tener inferioridad al momento de la captura, explicó.
Los pistoleros viajaban en dos vehículos, un Toyota Rav4 y un Land Rover, mientras que las armas estaban debajo de unas tablas envueltas en sábanas que fueron ubicadas gracias al olfato de los perros de la K-9.
Los detenidos responden a los apellidos Córdoba, Chacón, Ávila, Flores, Vargas, con amplio expediente por diferentes delitos; mientras otro de apellido Calderón, no registra reseña. Todos fueron trasladados hasta el Ministerio Público donde se les indagó, ahora están a la espera de alguna medida cautelar entre las que no se descarta prisión preventiva. En cuanto al paquistaní, no registra ingreso al país.
Las armas fueron cuidadosamente envueltas y llevadas hasta los laboratorios del Complejo de Ciencias Forenses para los respectivos análisis.