Miembros de la diversidad sexual de Honduras, informaron ayer que ya cuentan con su propia congregación religiosa y crearán una iglesia en el centro de la ciudad para realizar misas y demás actividades que les permita tener acercamiento con Dios.
La reverenda de la Iglesia Comunidad Metropolitana (ICM), Berta Ramírez, manifestó que ella realiza los servicios religiosos a las agrupaciones lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales (LGTBI) y predica la palabra del Dios a todos, pero en esta ocasión lo hace para un determinado grupo.
Todos vamos encaminados al mismo Dios (con las iglesias convencionales), donde hacemos litúrgica con textos bíblicos, oraciones, cantos, tomar pan y vino (la hostia), apuntó, para reiterar que no se trata de misas para la diversidad sexual, sino para grupos vulnerables.
Así explicó que ella es licenciada en teología y predica la fe católica de la Orden Luterana y es formada por la unión de diferentes comunidades cristianas. Se define como una iglesia inclusiva, ecuménica e interconfesional. Su orientación teológica es liberal y se pueden hacer bautizos y bodas.
Indicó que las misas son normales y si los feligreses se quieren confesar, eso es algo directamente con Dios, pero si alguien lo pude hacer con uno y lo quiere hacer confidencialmente, también lo hacemos.
En la actualidad se reúnen en un local alquilado en el centro de la ciudad, pero están en trámites de construir su propio edificio o iglesia en el sector del barrio La Ronda. El 9 de septiembre tendremos una prédica especial con toda la comunidad LGTBI, para darle gracias a Dios por cada bendición que nos da.
Por su parte, la directora de la Asociación para una Vida Mejor (Apudime), Sandra Zambrano, manifestó que ellas son parte de la iglesia Metropolitana y ayudan a personas vulnerables que no acogen las iglesias convencionales.
Nosotros acogemos a todas aquellas personas vulnerables, como borrachos, drogadictos y comunidad LGTBI para hablarles de Cristo. Un Cristo que les habla de amor que ve con mirada de piedad a cada uno de los seres humanos, señaló la dirigente social.
Agregó que de momento están buscando la personería legal, para constituirse como iglesia que permita congregar a personas que no asisten a las demás asociaciones religiosas del país.
Van a venir reverendos de México y Estados Unidos a formar hombres y mujeres en teología, para que puedan guiarlos espiritualmente, que les hablen de un Dios de amor y no un castigador que nos mira a todos por igual.
Zambrano recordó que en Honduras hay religiosos que nos recriminan a las personas por su diferencia o preferencia sexual. Para el caso en San Pedro Sula está el reverendo Pascual Torres, quien asiste con medicamentos retrovirales a las prostitutas y homosexuales contagiados con el VIH, que en los hospitales no tienen ese servicio.