Con el colorido folclore que caracteriza a los Masaya y al son del piano indígena, el pueblo católico se congregó en la alcaldía municipal para junto a las autoridades edilicias llegar hasta la parroquia San Jerónimo y así pedir a la iglesia católica la licencia para dar inicio a las fiestas patronales más largas de todo el país.
El tradicional recorrido fue acompañado por el consejo de ancianos de Monimbó así como de las instituciones de socorro y el tradicional toro venado El Malinche Carmen Toribio in Memoriam, como parte de la algarabía en honor al patrono de los Masaya.
Después que el edil Orlando Noguera Vega tocó la puerta de la casa de tatta chombo solicitando la licencia, con el abrir de ambas puertas se dio la autorización y afirmando que este era concedido por la iglesia católica el padre Antonio Espinoza dejó ingresar al pueblo junto con la venerada imagen de San Miguel de Arcángel.
«Vivir las fiestas en honor a San Jerónimo con fervor y amor religioso, San Jerónimo nos invita a buscar más de Dios, siguiendo su ejemplo para nuestra vida cristiana», refirió el Bismarck Conde, vicario foráneo de Masaya y cura párroco de la basílica Menor Nuestra Señora de la Asunción.
El cura párroco de la casa de San Jerónimo, destacó que se espera que las fiestas tengan un toque más evangelizador, para esto se ha hecho una labor previa con la cofradía, preparándose desde antes para que la festividad no pierda el brillo de celebración religiosa.
«Nuestros ancestros nos dejaron estas fiestas, por eso vengo con mis bisnietos de 5 y 4 años para que vivan con religiosidad en la fe católica», destacó Josefa Bravo, danzando al doctor que cura sin medicina al son de los filarmónicos.
Después de haber realizado la pedida de licencia, San Jerónimo regreso a su altar. Ahora la iglesia y el pueblo se prepara para el próximo 20 de septiembre, fecha destinada para la tradicional bajada del Santo Patrono de los Masaya.