En plena crisis con los maestros, el gobierno mexicano presentó el miércoles un nuevo modelo educativo que, entre otros cambios, dará a las escuelas autonomía para decidir parte del contenido que enseñarán a sus alumnos.
Aurelio Nuño, el titular de Educación, dijo que este nuevo esquema, un paso más en la reforma educativa lanzada por el ejecutivo en 2013, será debatido con todos los actores involucrados antes de que entre en vigor en 2018.
Según explicó, pondrá a las escuelas en el centro del sistema, las que deberán contar con una infraestructura «digna y suficiente» y que tendrán mayor autonomía para adaptar parte del currículo a las peculiaridades de cada zona.
Además, se dará prioridad a las escuelas con mayores carencias.
La presentación del modelo tiene lugar en plena crisis con un sector de los maestros que se oponen a la reforma educativa lanzada por el presidente Enrique Peña Nieto hace tres años.
Llega también cuando los líderes magisteriales acababan de iniciar una negociación con el gobierno para poner fin a las múltiples protestas, en algunos casos violentas, que se han vivido en el país en el último mes.
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Enseñanza, el ala del sindicato de maestros descontento con la reforma, criticó que se presentara el nuevo modelo antes de llegar a un consenso en las mesas de negociación.