Tres policías murieron el domingo en un tiroteo en Baton Rouge (Luisiana), donde la muerte de un hombre negro a manos de agentes a principios de julio desató una ola de indignación y protestas, según la oficina del sherif local.
Uno de los atacantes murió y otros dos «estarían en fuga«, indicó la misma fuente.
Las circunstancias exactas del tiroteo aún se desconocen, pero al parecer las fuerzas del orden habrían intervenido luego de registrarse un primer intercambio de disparos.
«Parece que ellos (los agentes) respondieron a un tiroteo«, dijo Casey Rayborn Hicks, portavoz del sherif, a la cadena local WAFB9.
Varios agentes -de la policía de Baton Rouge y dependientes de la oficina del sherif- resultaron heridos y fueron trasladados a hospitales locales, precisó el comunicado.
Este drama se produce en un contexto de muy fuertes tensiones raciales en la capital de Luisiana, que ha sido el teatro de numerosas manifestaciones de protesta contra la violencia policial en las últimas semanas.
Esas manifestaciones, reprimidas sin miramientos, se registraron luego de la muerte a principios de julio de Alton Sterling, un vendedor ambulante negro abatido por un policía.
La policía de Luisiana mató a tiros al hombre negro que vendía discos compactos fuera de una tienda, desatando protestas, en el último de una serie de casos de supuesta brutalidad policial contra sospechosos negros en Estados Unidos.
Un video grabado por testigos y puesto en línea muestra a un oficial corriendo tras un hombre negro y alto la madrugada del martes, antes de que otro agente lo ayudara a sujetarlo en el suelo y luego le disparara a quemarropa cuatro veces.
¿Le dispararon? ¡Oh Dios mío!, se escucha que grita un testigo en el video.
También puede escucharse a una mujer lamentándose y gritando repetidamente: ¡Oh Dios mío!.