Oficiales de la Fuerza Púbica de Costa Rica recibe una llamada por alerta de violencia, se llevan detenida a mujer pero esta confiesa armamento guardado por su exmarido.
Oficiales de la Fuerza Pública atendieron una llamada de alerta por violencia doméstica, sin embargo encontraron un cargamento con más de 20 armas, anoche en San Rafael de Escazú, ubicado en San José, capital de Costa Rica.
Entre el armamento había 9 pistolas calibre 9 mm, 8 rifles, un revólver, una AK-47, una pistola 45 cp versión civil mini uzi, entre otras. Las armas de fuego las escondía un sujeto de apellido Gómez en su casa de habitación en Trejos de Montealegre.
Este mismo hombre fue quien llamó a la policía denunciado a su expareja, de quien se separó hace 15 meses, por supuesta violencia doméstica.
Los oficiales de inmediato acudieron al sitio para atender el caso y desalojaron a la dama de la vivienda con la que Gómez comparte con un hijo. Una vez que la señora estaba en el aposento alerta a los oficiales del enorme armamento que está en una de las habitaciones, por lo que Fuerza Pública procede con la revisión y efectivamente dan con el botín.
Fuerza Pública recibe la solicitud para atender un tema de violencia doméstica, efectivamente los policías atienden y abordan la violencia como tal, a la vez ejecutan una orden de desalojo a la señora, en este caso, y ella misma es la que nos indica que dentro de la casa de habitación hay una cantidad de armas de fuego y que teme que estén en poder de su pareja, por esa razón hacemos la revisión, y estamos haciendo la contabilidad y la descripción de las armas de fuego, explicó Erick Calderón, jefe de la Delegación de San José.
El jefe manifestó que la señora ingresa a la casa y su expareja llama alertando de la situación, lo que no esperaban era dar con el cargamento de armas.
El señor alega que las armas son de colección, sin embargo, para efectos de colección se debe tener un permiso para coleccionarlas, porque las armas deben tener ciertas condiciones, entre ellas que estén inhabilitadas, y hemos revisado y todas están funcionando de manera adecuada.
Erick Calderón afirmó que efectivamente las armas están descargadas como lo indicó el sospechoso, pero constataron que el mecanismo de funcionamiento está activo y dispuesto a poder realizar un disparo, lo que va en contra de la Ley de portación de armas en Costa Rica.
Que además establece que una persona puede tener máximo tres armas de fuego, y esta persona guardaba más de 20 proyectiles. Es decir, una cantidad muy superior a la que estipula la legislación.
Además, la posición de una AK-47 es un arma prohibida, ninguna persona puede tener bajo ninguna circunstancia, porque es un arma que requiere un tratamiento especial, agregó el oficial.
El caso fue trasladado a la Fiscalía de Flagrancia, mientras que Fuerza Pública revisó minuciosamente cada arma para corroborar que tengan los papeles al día y descartar que las armas hubieran sido utilizadas en un asalto u otro tipo de delito.