La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, durante su intervención en la Cumbre 46° de la Organización de Estados Americanos (OEA), denunció que su país es víctima de ataques injerencistas de la derecha internacional.
Dijo que es su deber defender a su país, pues «últimamente la derecha internacional crea una especie de coyuntura que ha tomado a Venezuela como plato de banquete en el que todo el mundo opina, instruye y manda».
Ratificó que Venezuela es una nación libre y soberana, «un pueblo valiente que hemos sabido vencer los poderes imperiales».
Del mismo modo, invitó a los países miembros a fijar postura con relación a la posición parcializada del secretario general del bloque, Luis Almagro, por tener una posición parcializada con la derecha venezolana.
Denunció que el funcionario ha vulnerado las normas que enmarcan sus funciones y sostuvo que tiene pruebas irrebatibles de lo que consideró «una mala actuación» que tiene una posición intervencionista.
Ante tal situación, manifestó que los asuntos internos de los venezolanos deben ser dirigidos por el pueblo. «Mucho se dice sobre el Gobierno de Venezuela, que debe someterse a un referendo. Eso no lo deciden otros países, eso lo decide el pueblo de Venezuela conforme a sus leyes», señaló.
«Venezuela es víctima de un bullying internacional de la derecha, que apenas ganó unas pírricas elecciones, se cree con derecho de derrocar a los gobiernos de la región», sostuvo Rodríguez, quien indicó que si hay voluntad por parte de los Estados Unidos de querer ayudar a la nación suramericana, deben hacerlo quitando el bloqueo financiero que le han impuesto.
Responde a críticas de John Kerry
Delcy Rodríguez también dijo el martes que «los asuntos internos de Venezuela los dirimen los venezolanos», en respuesta a las críticas de su par estadounidense, John Kerry, durante esta Asamblea General de la OEA en Santo Domingo.
«Los asuntos internos de Venezuela los dirimen los venezolanos» y «en Venezuela no hay presos de conciencia», dijo Rodríguez, en una intervención fuera de agenda luego de que Kerry pidiera a ese país liberar a los «presos políticos».