La Conferencia Episcopal Panameña (CEP) enfatizó que la Iglesia católica tendrá tolerancia cero en los casos de abuso sexual contra menores cometidos por sacerdotes o religiosos.
El anuncio de la CEP se dio luego que el papa Francisco hiciera énfasis en la prevención de esos delitos y para ello creó una comisión especial para atender estos casos.
Además, el papa estableció la obligación de los obispos de denunciar los abusos y las sanciones a que se verán sometidos en el caso de que no lo hagan.
En un comunicado de la CEP se detalla que en base al Derecho Canónico al momento en que el obispo tenga noticia, al menos verosímil, de un delito, se le exige que investigue con cautela, personalmente o por medio de una persona idónea, sobre los hechos y sus circunstancias.
También deberá establecer la imputabilidad del implicado a no ser que esta investigación parezca del todo superflua. Hay que evitar que, por esta investigación, se ponga en peligro la buena fama de alguien, recalcó la norma.
La CEP ha elaborado unas líneas guía para tratar los casos de abuso sexual de menores cometidos por clérigos o religiosos.
Esos pasos son para asegurar el bien común de los fieles y proteger a los niños y jóvenes frente al deber de dar una respuesta adecuada a los eventuales casos.
La finalidad de esta guía elaborada por la CEP es facilitar a los obispos panameños un instrumento que responda a las indicaciones de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe y les ayude en el tratamiento de los casos y se ha tenido en cuenta que la responsabilidad primera es del obispo.
Para la aplicación de las líneas guía en cada diócesis del país se nombrará un sacerdote para recibir las denuncias y se formará un equipo interdisciplinario para la atención de las víctimas y del sacerdote o religioso acusado.
Sin embargo, ese equipo interdisciplinario estará dedicado a la formación de personas para la prevención del delito.