Las fuertes chiflonadas de aguas que caen del cerro el chonco cada vez que llueve, es un problema para las más de 50 familias que habitan en cinco comunidades, ubicadas en las cercanías de volcán San Cristóbal perteneciente a la cordillera los maribios en el departamento de Chinandega.
Las primeras lluvias del invierno se han hecho sentir en la comunidad Buena Esperanza, ubicada a 20 kilómetros de la cabecera departamental, uno de los cuatro puntos críticos identificados por la Unidad de Gestión de Riesgo UGR de la municipalidad. Sus habitantes dicen que las fuertes corrientes han dejado los patios de las casas anegadas por el desborde del cauce y a pesar que la comuna ha construido obra de mitigación para hacerle frente a la problemática se necesitan emprender más trabajos, el muro ha ayudado un poco pero el agua se sigue metiendo a los patios. La preocupación es que las familias que viven al otro lado del cauce quedan incomunicadas por eso vemos la necesidad que se construya una caja puente informo Yelba Gómez habitante afectada.
Sandra Zepeda tiene seis meses de embarazo. Dice que las primeras lluvias del invierno, llenaron la vivienda de agua. queremos que nos ayuden con la construcción del zanjón y la caja puente porque son las 12:00 de la noche y estamos sacando agua del solar porque el caudal es fuerte, dijo preocupada.
Ante las peticiones hecha por los habitantes la alcaldesa Aura Lila Padilla, envió a técnicos de la UGR para que en conjunto con los gabinetes de la familia realicen la caracterización de los puntos críticos en las comunidad Buena Esperanza; El Piloto; La Joya y Ranchería. Los cuales constataron que estás familias quedan aislados, por el efecto de las lluvias que se precipitan sobre el territorio, cuatro puntos identificados de alto riesgo. Tres de ellos están localizados en la parte baja de la cordillera volcánica y otro en la parte sur.
En las cercanías de la zona noroeste del volcán San Cristóbal viven unas 530 personas para un total de 125 familias que habitan en zona vulnerables ante cualquier eventualidad, por eso uno de los planes que realizan el gobierno local son la reforestación y las jornadas de limpieza. Limpiamos cauces. Alcantarillas. Cunetas, calles, solares, los colegios, para que las corrientes no se detengan en cauces y lugares públicos porque hay muchos desechos sólidos lo que hace que las corrientes de agua formen balseras y con ellas las inundaciones en las comunidades. Además tenemos ruta de evacuación y está listo el albergue de la escuela Emmanuel Mongalo, de Rancherías, por si llegara a ocurrir una emergencia, porque la idea de este modelo de gobierno es garantizar la seguridad de las familias, manifestó Pedro Zamora líder comunitario.
Álvaro Romero, Técnico de Gestión de Riesgo del Municipio, levantó censo de los puntos críticos y declaró que 25 familias están en riesgo en Buena Esperanza, porque es un sitio plano y bajo de la cordillera volcánica.
Además índico que el año pasado se construyó un muro perimetral de un metro de altura, pero por las fuertes corrientes que bajan del cerro no dio resultados. la población dice que urge subirlo más. Sugerimos también construir una caja puente, para que las otras 30 familias que quedan aisladas, puedan tener acceso a la carretera queremos salvar vidas. Queremos identificar los albergues, en que situación están para prepararnos ante los estragos que pueda dejar a su paso el fenómeno La Niña, dijo Romero.
Las fuertes lluvias, han hecho que las aguas que bajan de los Volcanes Chonco y San Cristóbal afecten a las comunidades La Joya, El Piloto, Buena Esperanza, en la parte oriental y la comarca San Benito, en la zona sur del municipio, caseríos que quedan incomunicados por las aguas que bajan e inundan patios y viviendas. El sábado próximo, la comisión visitará repartos y colonias del sector urbano de la ciudad de Chinandega caracterizada por tener seis ejes de vulnerabilidad. Deslizamientos, incendios forestales, Sismos, derrumbes, erupción volcánica e inundaciones.