El FBI interrogó a una cercana asesora de Hillary Clinton como parte de una investigación sobre el uso, por parte de Clinton, de un servidor de internet privado cuando ella era secretaria de Estado, dijo una fuente allegada a la pesquisa.
El FBI y el Departamento de Justicia han estado investigando si por el servidor pasó alguna información secreta del gobierno.
La asesora, Huma Abedin, fue una de las colaboradoras más cercanas de Clinton incluso fue su coordinadora de despacho durante su período como secretaria de Estado. No quedó claro por el momento si otros allegados serán interrogados o si lo será la misma Clinton.
«Desde el comienzo, Hillary Clinton se ha mostrado dispuesta a responder cualquier pregunta que ayude al Departamento de Justicia y esperamos que cualquier otra persona haga lo mismo», dijo en un comunicado el portavoz de Clinton, Brian Fallon. «Estamos confiados de que la investigación hallará que no hubo nada inapropiado».
Se desconoce cuánto tiempo demorará la pesquisa. El director del FBI James Comey ha expresado que no hay un cronograma fijo y que la investigación se realiza con sumo cuidado y sin tomar en cuenta factores políticos.
CNN fue el primer medio noticioso que reportó que Abedin había sido interrogada.
Una portavoz del Departamento de Justicia se negó a hacer comentarios y los portavoces del FBI no devolvieron llamadas pidiéndole declaración.
El miércoles, un juez federal en Washington dijo que podría ordenarle a Clinton, la casi segura candidata presidencial del Partido Demócrata, a testificar bajo juramento sobre si usó el servidor de internet privado para evadir pedidos de divulgación de documentos públicos.
La orden del juez Emmet Sullivan fue en aprobación de una solicitud del grupo derechista Judicial Watch para interrogar a seis funcionarios antiguos y actuales del Departamento de Estado sobre los objetivos de la creación de ese sistema de correo electrónico. Las entrevistas podrían apoyar una denuncia de Judicial Watch de que el Departamento de Estado no realizó un registro correcto de los archivos públicos al responder a una solicitud con base en la Ley de Libertad de Información.
Hillary Clinton reconoció durante la campaña que haber instalado ese sistema fue un error, pero insiste en que nunca envió ni recibió mensajes confidenciales o reservados.