Minutos de angustia y terror pasaron los familiares de los dos jóvenes que fueron hallados encostalados en el anillo periférico de Comayagüela, Honduras.
Los médicos forenses reconocieron a las víctimas como Douglas Eduardo Medina González (15) y Anthony Vanegas Funes (16), ambos residentes en la colonia El Hato de Enmedio.
Según testigos, los jóvenes salieron la tarde del pasado miércoles a jugar fútbol, como lo hacían frecuentemente, Pero horas después, los parientes recibieron un horrible mensaje, en el cual les informaban que iban a matar a los adolescentes que fueron interceptados por los criminales y luego trasladados a una solitaria zona para ultimarlos.
Acongojados y sin saber qué hacer, rogaban a Dios que todo se tratara de una mala broma, pero no fue así.
Tras recibir el primer mensaje, los asesinos les enviaron una imagen de los jóvenes aún con vida, dándoles una esperanza que no los matarían, transcurridos algunos minutos, los familiares recibieron una horrible fotografía, la cual mostraba los cadáveres en costales.
Aterrorizados se desplazaron a una posta policial para dar parte a las autoridades de lo ocurrido, los uniformados en rápida acción iniciaron la búsqueda de los menores, cuyos cuerpos fueron encontrados en la colonia Loarque.
Investigaciones señalan que los cadáveres fueron lanzados de un carro en marcha, del cual se desconocen las características.
Los dolientes retiraron esta mañana los cuerpos de la morgue capitalina para darles cristiana sepultura, así mismo comentaron que las víctimas no tenían problemas con nadie y que desconocen el motivo que conllevo al asesinato.