Durante varias décadas Bolivia fue uno delos países más afectados por la malaria en el continente americano, pero en el último decenio bajó drásticamente la incidencia del mal y está en camino de erradicarlo gracias a que las condiciones de vida mejoraron, informaron las autoridades.
En una década la tasa bajo de 12 a dos fallecidos por cada 1.000 habitantes, informó el Ministerio de Salud. En 2015 de 6.906 personas contagiadas por el mosquito transmisor de la malaria, sólo una falleció y es la cifra más baja desde 1998, cuando se reportaron 74.350 enfermos, dijo el jueves a The Associated Pres el responsable del Programa Malaria, Luis Luque.
«Estamos en una etapa de pre-eliminación de la malaria«, agregó.
Días atrás la ministra de Salud Ariana Campero destacó que «nos hemos adelantado en el cumplimiento de los objetivos de desarrollo del milenio en cuanto a malaria«, en referencia a ocho propósitos de desarrollo humano que acordó Naciones Unidas en el año 2000.
El reciente auge económico del país por los buenos precios de las materias primas ha reducido la pobreza y posibilitó una mayor inversión en prevención y tratamientos de salud, según Luque.
Transmitida por la picadura de un mosquito del trópico -anopheles-, la malaria o paludismo castigó al continente por décadas y Bolivia estaba entre los países más afectados. Aunque ha reducido su impacto todavía provoca unas 38.000 muertes al año en el continente, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Africa es la región más castigada.
En Sudamérica sólo Chile y Uruguay están libres del mal. En Bolivia es un problema endémico, pero en los últimos años se localizó en regiones pobres y remotas de la Amazonia.
La enfermedad provoca fiebre, escalofríos, sudoración, dolor de cabeza, insuficiencia hepática, trastornos nerviosos y coma. El tipo falciparum es letal y puede provocar la muerte pero es el menos común ya que sólo representa 21% de los casos de malaria. En tanto el vivax causa 78% de los casos en el continente y no provoca la muerte, de acuerdo con la OMS.
Con apoyo de ese organismo, el Ministerio de Salud anunció que hasta 2018 se reducirá a cero el tipo falciparum y a la mitad el tipo vivax.
Mientras la malaria está en retroceso en el continente, otras enfermedades trasmitidas por mosquitos cobraron auge como el dengue, la chikungunya y el zika.