Google, el buscador más popular del mundo, acaba de aterrizar en La Habana. Allí abrió su primer centro tecnológico, donde ofrece acceso gratuito a internet a una velocidad de conexión superior a la que provee Etecsa. El servicio es sin costo por razones de branding, para posicionar la marca en un país en plena pubertad informática.
¿Google? ¿Qué es eso?, pregunta una señora, asombrada de lo buena que está la conexión en los alrededores del cibercafé, recién instalado en el estudio del artista y diputado Alexis Kcho Leyva. Su taller alberga el Museo Orgánico Romerillo (MOR) y desde hace poco más de un año inauguró el primer espacio gratuito de internet en la isla.
Gracias a sus estrechos vínculos con el gobierno, Kcho se convirtió entonces en el único proveedor privado de ADSL. Costeaba y compartía su wifi, autorizado por el Ministerio de Cultura. Para acceder de la señal era necesario teclear la contraseña aquinoserindenadie. Hubo que derrumbar viejos tabúes y obstáculos que Estados Unidos tiene en contra de las relaciones de tipo tecnológico con Cuba, explica él en clave de victoria. El museo que gestiona también ha cambiado de nombre y ahora se llama, por este orden, Google + Kcho. MOR.
El beneficio, en cualquier caso, es para los cubanos. En el nuevo centro, dotado de 40 plazas, podrán familiarizarse con la tecnología de última generación que produce Google, como los cardboard, unos visores de realidad virtual para teléfonos móviles, facilitados por la compañía. Desde el cibercafé ya se realizan transmisiones en línea de actividades educativas con la comunidad, que pueden verse en el canal de Youtube del museo, ubicado en una barriada pobre de La Habana.
Los usuarios también disponen de 15 computadoras portátiles Chromebook, con enlace directo a la nube. Una experiencia novedosa para la mayoría de los cubanos, acostumbrados al uso del sistema operativo Windows.
Con uno de los índice de penetración de banda ancha más bajos del mundo (no supera el 1%), la isla cuenta con 70 puntos de acceso inalámbrico a internet, situados en parques públicos.