Verifican casas en contornos de centros penales de El Salvador. Cerca de un centenar de viviendas ubicadas en los alrededores del centro penal de Ciudad Barrios, en San Miguel, fueron visitadas ayer por grupos de soldados y policías para ejecutar el plan casa por casa en busca de señales de internet inalámbrico y algún ilícito.
Vamos tras las señales wifi, porque en determinado momento en este penal se va la energía eléctrica, y es entonces que ellos se conectan, y hacen mensajes para sus pandilla; se va a verificar cada una de las casas, porque sabemos de personas que han sido obligadas por pandilleros a contratar servicio de internet y la gente tiene que acceder por el miedo, comentó el jefe de la delegación de San Miguel, comisionado Gersan Pérez.
Las casas que cuenten con servicio de internet wifi en un rango de dos kilómetros alrededor del centro penal y que no tengan la documentación respectiva o no justifiquen su uso, serán reportadas a las compañías de telefonía y solicitada su respectiva desconexión.
Este operativo inició el martes, dejando como resultado la ubicación de ocho casas entre apartamentos y mesones, donde duermen familiares de los reos.
Las autoridades también desarrollaron un operativo en las casas cercanas al centro penales de Quezaltepeque, La Libertad.
El director de Centros Penales de El Salvador, Rodil Hernández, dijo que los resultados de estos operativos serían informados ayer por la noche a través de las redes sociales de esa institución.
Hernández también confirmó una requisa en el sector 1 y 2 del centro penal de Izalco, Sonsonate. En este procedimiento se decomisó un teléfono celular, 31 chips y dos baterías para teléfono celular. Además de la incautación de 35 armas blancas, incluidos corvos y punzones.
Las medidas extraordinarias que incluyen registros de casas se aplicarán 15 días y el rango de operación de los registros casa por casa es de 2 kilómetros.