Una masiva demostración contra la aprobación del aborto en Chile se realizó el lunes frente al palacio de gobierno, mientras a dos cuadras de distancia unas cien personas se manifestaron a favor de la interrupción del embarazo. Las demostraciones se realizaron a cuatro días desde que la Cámara de Diputados aprobó la despenalización del aborto en los casos en que esté en peligro la vida de la madre, si el feto es inviable o en casos de violación.
«Estamos a favor de la vida, de que se respete la vida de todo ser humano porque es digna desde el momento de la concepción (y) se debe respetar la vida hasta el momento de su muerte natural», dijo Catalina Alarcón, junto a un millar de mujeres contrarias a la aprobación del aborto vestidas con polleras rojas.
Otra manifestante, Andrea Valet, dijo que se oponía al proyecto impulsado por el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet, «porque yo creo que la vida fue dada por Dios».
A poca distancia, frente a la Universidad de Chile, unos cien hombres y mujeres apoyaron la despenalización del aborto.
Beatriz Batache, una ex presa política del gobierno de Augusto Pinochet, 1973-1990, en alusión a políticos de derecha que apoyaron al gobierno militar y que se oponen a la despenalización del aborto, declaró a The Associated Press que mientras las mujeres estaban en poder de la policía represiva, a «esos cuerpos que podían dar vida se les colocó corriente en la vagina, se les torturó en los senos, se las violó… y hoy vienen a decir que quieren vida».
Soledad Acevedo señaló que «todas las mujeres tenemos el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos, nuestras vidas, nuestro proyecto de vida y nuestra sexualidad».
En una fecha aún por determinar el Senado deberá votar el proyecto de Bachelet, quien aunque cuenta con un par de votos de mayoría en la cámara alta, no tiene asegurados los sufragios de todos los senadores demócrata cristianos. Algunos se oponen a respaldar la causal de violación para interrumpir un embarazo.