Desde enero hasta la primera quincena de marzo fueron asesinadas 1,715 personas, 23 cada día, lo que significa que hubo el doble de víctimas que en igual período de 2015, cuando fueron asesinados 858 personas en El Salvador, según la PNC.
José Andrés García Ayala, de 42 años, se pasaba los días haciendo tejas junto a dos hijos y por las noches y fines de semana se dedicaba a trabajar para su comunidad, pero ayer tres supuestos pandilleros ingresaron al terreno donde se encontraba haciendo las tejas para dispararle con un fusil M-16 y un arma calibre 9 milímetros.
Tras el ataque, sus dos hijos murieron sobre las tejas y García Ayala falleció cuando era trasladado hacia una unidad de salud en uno de los vehículos de sus compañeros de trabajo, según relataron sus familiares a la Policía Nacional Civil (PNC).
El triple crimen ocurrió en uno de los terrenos donde trabajaban los habitantes del caserío La Quesera. Con este triple homicidio del caserío La Quesera van 10 víctimas de la violencia en el departamento de Cabañas en marzo.
Los hijos de García Ayala fueron identificados por la Fiscalía General de la República (FGR) como Douglas Armando García Parras, de 19 años y Andrés Vladimir Ayala Parras de 22. De acuerdo con los vecinos, familiares y la policía, los hermanos no tenían vinculación con pandilleros que llegan con frecuencia al caserío.
No sabemos por qué sucedió esta tragedia, los muchachos y el señor eran tan buenas personas, no se metían con nadie y, al contrario, ayudaban para que este caserío se desarrollara, dijo un vecino de las víctimas.
Los homicidios durante la primera quincena del marzo, según datos de la PNC, se han concentrado en el departamento de San Salvador con 96 homicidios, seguido de La Libertad, con 46.
García Ayala era el presidente de la Asociación de Desarrollo Comunal (ADESCO) de la zona desde hace varios años. Durante su gestión logró que la alcaldía municipal destinara fondos y recursos para encementar la calle principal de La Quesera, logró que instalaran energía eléctrica y que colocaran lámparas en los postes del tendido eléctrico.
Además, coordinaba eventos deportivos para trabajar en prevención de violencia y actualmente se encontraba en pláticas con la embajada de Japón y algunas organizaciones no gubernamentales para gestionar un proyecto de agua potable. No sabemos si esta tragedia tiene que ver con su trabajo como parte de la ADESCO, pero si es por eso, nadie va a querer retomar los proyectos que don José tenía y aquí entonces se acabó el desarrollo, dijo una vecina.
Este es el homicidio múltiple más reciente cometido por pandilleros en contra de personas que se encontraban trabajando.
Ayer hubo un doble homicidio en el pasaje Gracias a Dios de la colonia Milagro de la Paz, en el departamento de San Miguel, donde una de las víctimas fue identificada como Miguel Ángel Romero, un comerciante de 18 años. Él y otro hombre fueron atacados cuando iban a comprar leña.
Mientas que en la colonia Villa El Progreso, en Sonsonate, murieron dos supuestos pandilleros en un tiroteo con la PNC.