El aspirante a la nominación presidencial republicana Marco Rubio atacó el jueves al favorito Donald Trump por su postura frente a la inmigración ilegal y su enorme riqueza, aprovechando un debate para tratar de evitar que el magnate logre grandes avances en la carrera a la Casa Blanca la próxima semana.
En la que podría ser su presentación más agresiva hasta la fecha, Rubio recordó las cuatro bancarrotas de Trump, el uso de inmigrantes polacos para que trabajaran en un centro turístico de Florida y sugirió que el multimillonario de Nueva York no estaría en la posición en la que se encuentra ahora en el mercado inmobiliario sin la herencia de su familia.
En un debate organizado por la cadena CNN en la Universidad de Houston, Marco Rubio y el senador Ted Cruz tuvieron una de sus últimas oportunidades para intentar poner en dificultades al multimillonario de lengua afilada antes del 1 de marzo, cuando una docena de estados votan en el «Súper Martes».
Trump, de 69 años, ha ganado tres de las cuatro primeras votaciones en la lucha por la nominación para la elección del 8 de noviembre, en la que se elegirá al sucesor del presidente Barack Obama.
Rubio, quien asumió el papel del principal crítico de Trump luego de que el ex gobernador de Florida Jeb Bush abandonó la carrera, rápidamente acusó a Trump de cambiar de postura sobre la inmigración ilegal para obtener beneficios políticos.
El senador de Florida dijo que el magnate inmobiliario habla con dureza sobre el tema ahora, pero que en el 2012 dijo que el candidato republicano Mitt Romney perdió la carrera contra el presidente Obama por declarar que la inmigración ilegal se solucionaría con la autodeportación.
«Muchas de las posturas que ha asumido ahora son nuevas para él», dijo Rubio durante el debate. Trump respondió que Romney perdió en el 2012 porque «hizo una campaña terrible».
Trump rechazó las críticas e insistió en que si fuera presidente, obligaría a México a pagar por un muro de 1.610 kilómetros de largo, que costaría entre 10.000 millones a 12.000 millones de dólares a lo largo de la frontera entre México y Estados Unidos. Anteriormente en el día, el ex presidente mexicano Vicente Fox dijo que México no pagaría por la estructura, usando un lenguaje colorido.
«Lo haré y el muro acaba de crecer 10 pies (3 metros), dijo Donald Trump en respuesta a los comentarios de Fox.