El presidente Barack Obama afirmó este martes que el centro de detención de Guantánamo socava la seguridad nacional de Estados Unidos, al presentar un plan para cerrar la prisión y trasladar a algunos detenidos a suelo estadounidense. «Por muchos años ha estado claro que el centro de detención de Guantánamo no mejora nuestra seguridad nacional. La socava», dijo Obama en la Casa Blanca.
Barack Obama, pidió al Congreso que realice una «evaluación justa» sobre su plan para cerrar la prisión militar de la Bahía de Guantánamo, en Cuba, y añadió que no desea que la persona que lo sucederá en la Casa Blanca tenga que seguir lidiando con el tema.
La propuesta del Pentágono señala 13 posibles penitenciarías en suelo estadounidense para el traslado de los detenidos restantes, pero no identifica las prisiones ni indica como la más idónea a ninguna en particular, dijeron el martes funcionarios del Gobierno.
Obama se comprometió a cerrar la prisión y trasladar a los detenidos cuando era candidato a la Casa Blanca en el 2008. Los legisladores se oponen en su mayoría a transferir a los prisioneros a Estados Unidos y resulta poco probable que el mandatario demócrata tenga éxito en su último intento por convencer al Congreso.
«Déjennos avanzar y cerrar este capítulo», dijo Obama en un discurso en la Casa Blanca. «No quiero dejar este problema al próximo presidente, quienquiera que sea», añadió el presidente, que finalizará su segundo mandato en enero del 2017.
Los prisioneros de Guantánamo, detenidos en la estación naval estadounidense en el sur de Cuba, fueron capturados por tropas del país norteamericano en Irak y Afganistán. La instalación simboliza las agresivas prácticas de Washington en torno a seguridad tras los ataques del 2001, entre las que se incluyen denuncias de tortura.
Los costos de cierre y traslados ascenderían de 290 millones a 475 millones de dólares, dijo un funcionario del Gobierno a periodistas en una conferencia. Albergar a los reos restantes en Estados Unidos sería entre 65 y 85 millones de dólares menos costoso que en la prisión en Cuba, sostuvo, de modo que los gastos quedarían cubiertos en un periodo de tres a cinco años.
Unos 35 prisioneros serán trasladados desde Guantánamo a otras naciones este año, lo que dejaría el número final de reclusos en 60, de acuerdo a funcionarios.
Obama está considerando ordenar el cierre de la instalación por decreto si el Congreso no aprueba su propuesta.