Los aspirantes a la nominación republicana para la presidencia de Estados Unidos Marco Rubio y Ted Cruz lucharán por convertirse en la alternativa de su partido al magnate Donald Trump en el caucus que se celebrará el martes en Nevada, el último choque antes de las decisivas pruebas del mes de marzo.
Los sondeos muestran a los dos senadores casi empatados en el estado tras las primarias del sábado en Carolina del Sur, donde Rubio superó a Cruz por menos de 1.000 votos, Trump ganó con una diferencia de 10 puntos porcentuales y el otrora favorito Jeb Bush abandonó la contienda.
Tanto Rubio como Cruz salieron de Carolina del Sur aumentando sus críticas contra Donald Trump y con el ojo puesto en los 12 comicios del «Súper Martes» del 1 de marzo. Esta fecha es vital en el proceso estatal de nominaciones para elegir a los candidatos republicano y demócrata que lucharán por la Casa Blanca el 8 de noviembre.
Rubio atacó las credenciales del magnate en política exterior y sanidad, mientras que Cruz cargó contra lo que denominó como opiniones liberales sobre aborto y política de salud.
Trump, más magnánimo hacia sus rivales el día después de su último triunfo, recuperó su clásico estilo combativo en la mañana del lunes con una serie de publicaciones en Twitter.
Anunciando su llegada al Trump International Hotel de Las Vegas, Nevada, el multimillonario ridiculizó a Cruz por no cumplir las expectativas de que lograría un apoyo sólido de los cristianos evangélicos de Carolina del Sur.
«La razón por la que Ted Cruz perdió a los evangélicos en Carolina del Sur es porque es un MENTIROSO de talla mundial, ¡y a los evangélicos no les gustan los mentirosos!», tuiteó Trump.
También criticó a Rubio, afirmando que no cumplió sus promesas con los votantes de su estado natal de Florida.